En el empleo: en Argentina, el 87,5% de las personas con discapacidad están desempleadas. En América Latina, la exclusión laboral genera una pérdida del 3% al 7% del PIB regional.
En la educación: solo el 33,8% de los jóvenes con discapacidad terminan la secundaria, frente al 73,1% de quienes no tienen discapacidad.
En la economía: la falta de accesibilidad aumenta la dependencia de subsidios y genera costos de oportunidad, afectando la autonomía y el desarrollo económico de las familias.
En la salud: en países como México, los hogares con personas con discapacidad gastan hasta un 97% más en atención médica que aquellos sin discapacidad.